Las armas contundentes son toda clase de armas cuerpo a cuerpo diseñadas para infligir daño a través de duros golpes traumáticos, en vez de perforando o cortando. Se caracterizan por una falta de afilamiento en sus cuerpos, a menudo para combatir con ellas sin buscar la muerte del objetivo. En esta categoría suelen incluirse todo tipo de objetos como mazos, martillos, palos o clavas.
Hasta la llegada de las armas de fuego, fueron las principales armas usadas por los humanos en la Tierra junto a las espadas. Muchos guardias de ciudades y fortaleza las usaron, así como los miembros de las órdenes de Asesinos y Templarios.