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«Murió en Versalles. Debió ser… ¿En el 76? ¿77? Diciembre, según recuerdo. Sin testigos.»
Pierre Bellec sobre la muerte de Charles Dorian[fte]

La misión a Versalles emprendida por el maestro Templario Shay Patrick Cormac en diciembre de 1776 tenía la finalidad de obtener la caja de los Precursores de manos del Asesino Charles Dorian. Habiendo protegido al embajador estadounidense en Francia, Benjamin Franklin, días antes, Cormac hizo uso de sus contactos para poder entrar en el palacio de Versalles.

Una vez allí, el Templario se abrió paso a través de las habitaciones del palacio sin llamar la atención. Finalmente, al ver que Dorian, quien ya había recibido la caja, estaba buscando a su hijo Arno, Cormac decidió aprovechar la situación y le apuñaló en el pecho. Sigilosamente, colocó a su víctima en una silla y partió con la caja, sin que nunca se supiese que Cormac había cometido el asesinato. Este evento sería uno de los muchos factores que llevaron a Arno, en 1789, a buscar redención y unirse a los Asesinos.

Preludio[]

«Shay, aunque la búsqueda de los yacimientos de los precursores haya acabado, quiero la caja. Búscala para la Orden de los Templarios, y para mí.»
―Haytham Kenway[fte]

Durante la guerra de los Siete Años, el Asesino Louis-Joseph Gaultier envió la caja de los Precursores a Francia, para evitar que los Templarios Coloniales se hiciesen con esta. Tras la derrota de los Asesinos Coloniales en 1760, el Gran Maestro Haytham Kenway encomendó a su agente Shay Patrick Cormac la búsqueda de la caja, aún sabiendo que le podría llevar toda la vida. De una forma u otra, Cormac acabó siguiendo la pista del artefacto hasta París, a donde viajó en 1776. El día de Navidad, el Templario se encontró con un antiguo contacto suyo, Benjamin Franklin, quien ahora ejercía como embajador de Estados Unidos en Francia. Cormac salvó a su aliado de bandidos, y a cambio, le pidió que le llevase a Versalles, bajo el pretexto de querer reunirse con unos mercaderes; en realidad, iba a interrumpir la entrega de la caja,[1] que se efectuaría el día 27 de diciembre.[2]

La misión[]

«Solo termino asuntos pendientes.»
―Shay Cormac[fte]
Memories of Versailles 2

Charles pide a su hijo que permanezca sentado.

Shay Cormac acompañó al embajador hasta las puertas del palacio, donde se despidieron y se dieron las gracias. Mientras Franklin se dedicaba a hablar con gente en la entrada, el Templario localizó a Charles Dorian, el Asesino al que se le daría la caja,[1] acompañado de su hijo Arno. Padre e hijo fueron a un pasillo del palacio, donde Charles dijo al joven que esperase con valor, pues debía tratar un tema importante, muy a pesar de Arno.[2]

El joven Dorian se fue a jugar con Élise de la Serre, la hija del gran maestro Templario François de la Serre,[2] a la vez que su padre se reunía con los Asesinos. Por otra parte, Cormac recorrió el palacio en busca de Dorian, en ningún momento siendo detectado por los guardias del rey.[1] Arno robó una manzana para Élise, ambos saliendo airosos del robo y sin represalias.[2] Los dos se presentaron, sin darse cuenta de que el agente Templario pasaba por su lado, dirigiéndose hacia donde estaba Charles Dorian.[1]

Cuando los Asesinos terminaron su reunión, Dorian partió con la caja hacia donde había quedado con su hijo; al no verlo, inquirió a la gente del palacio por su hijo. En ese momento, Cormac usó sus habilidades de sigilo social para apuñalar en el pecho al Asesino con su hoja oculta. El Asesino indicó que, aunque hubiese perdido la caja, los Asesinos de Connor habían vuelto a tener ventaja sobre los Templarios en las Colonias por la revolución estadounidense. Cormac le respondió diciendo que, a cambio, los Templarios llevarían a cabo otra revolución, y tomó la caja mientras dejó a Dorian reposando en la silla donde tendría que estar Arno.[1]

Cormac dejó la estancia conforme su víctima se levantó, y este cayó muerto, alertando a la gente y los soldados del palacio.[1] Entre las muchas personas que vieron el cadáver, estaba Benjamin Franklin, quien no cambió su opinión de Francia por el acontecimiento. Nada más ver soldados corriendo, De la Serre y Dorian fueron a ver que ocurría, para encontrarse con el padre de Arno muerto. El joven Dorian dejó caer el reloj que su padre le había entregado, permaneciendo inmóvil frente al fallecido Charles, dándose cuenta de que, si le hubiese esperado allí, no habría sido asesinado. El padre de Élise, François de la Serre, le sacó de su trance y pidió que fuese con él.[2]

Consecuencias[]

Arno Dorian: «¡Por esa razón me uní a la Hermandad!»
Hervé Quemar: «Sí. No por compartir nuestros ideales o sentir la llamada al servicio. Sino por venganza.»
Arno Dorian: «No. Por redención.»
— Dorian explica a Hervé Quemar por qué se unió a los Asesinos[fte.]
Memories of Versailles 9

François de la Serre frente a Arno Dorian, a quien terminó adoptando.

Nunca se supo quién había matado a Charles Dorian,[2] y tampoco está claro qué hizo Cormac nada más recuperar la caja.[1] En cualquier caso, los Templarios estadounidenses fueron finalmente derrotados por Connor en 1782, y se desconoce qué destino corrió Shay.[3] Arno fue adoptado por François de la Serre, quien mantuvo al joven alejado de la guerra Asesino-Templaria por respeto a su enemigo. De la Serre fue asesinado en 1789 por unos Templarios golpistas, y Dorian fue culpado del asesinato y encarcelado en la Bastilla.[2]

En la cárcel, Dorian conoció al mentor de su padre, el maestro Asesino Pierre Bellec, que le dio a conocer la participación de su familia en la guerra milenaria de Asesinos y Templarios. Buscando redención, Dorian fue iniciado en los Asesinos ese mismo año, y cazó a los homicidas de De la Serre durante la revolución francesa, orquestada por los Templarios,[2] tal y como Cormac había prometido.[1]

Entre bastidores[]

La misión a Versalles es el único evento de la saga Assassin's Creed que se puede jugar con dos personajes distintos, en sus respectivos juegos. Una versión del suceso es la vivida por Shay Cormac, protagonista de Assassin's Creed: Rogue, terminando el juego con esta misión; la otra versión es la de Assassin's Creed: Unity, al principio del videojuego, mostrando cómo el protagonista Arno Dorian perdió a su padre. Ambos videojuegos salieron a la venta el 13 de noviembre de 2014, y este suceso enlaza Rogue con Unity, de forma que los jugadores que jueguen a ambos juegos desvelen algunas incógnitas sobre estos.

Apariciones[]

Notas y referencias[]

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